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En el sitio web del Departamento de Ingresos de Tailandia, se lanzó un cuestionario de audiencia pública para recopilar la opinión pública sobre un impuesto de salida del gobierno de 1,000 baht.
El cuestionario dice que el nuevo impuesto ayudará a evitar que los lugareños gasten demasiado a bordo. La audiencia se extenderá del 3 al 17 de mayo, con el objetivo de evaluar un posible impacto del impuesto.
Según el cuestionario, los ciudadanos tailandeses y los residentes permanentes extranjeros deberán pagar un impuesto de salida de 1,000 baht para viajes aéreos y 500 baht para viajes terrestres y marítimos. Esto tiene como objetivo generar ingresos adicionales para el gobierno y evitar que los tailandeses gasten demasiado en el extranjero, según la encuesta. También tiene como objetivo reducir el déficit comercial del país.
La audiencia fue una sorpresa para muchos operadores de turismo en Tailandia.
Charoen Wangananont, presidente de la Asociación de Agentes de Viajes de Tailandia (TTAA), dijo que la recaudación de impuestos y su principio son poco realistas e ilógicos porque Tailandia nunca ha encontrado ningún problema relacionado con un déficit comercial en la industria del turismo, dado que el 70% de los ingresos totales se genera a partir del turismo receptor, mientras que sólo el 30% de los gastos están relacionados con el turismo emisor.
También dijo que 1,000 baht es demasiado caro en medio de las condiciones económicas actuales y podría tener un efecto importante en el turismo, superando potencialmente los ingresos que el gobierno espera generar.
“Pensamos que se trataba de una noticia falsa la primera vez que vimos la encuesta porque no es el momento adecuado para hacer tal movimiento. Si el gobierno realmente cree que necesita recaudar un impuesto de salida, debería haberlo hecho antes de la pandemia, cuando la industria del turismo estaba en alza. La tasa de gravamen también debería ser más apropiada”, dijo Charoen.
Chotechuang Soorangura, vicepresidente de TTAA, dijo que el gobierno debe ser transparente sobre cómo gastará los ingresos.
También estuvo de acuerdo en que la tasa de gravamen es demasiado cara, por ejemplo, Japón también tiene un impuesto de salida, pero es de solo ¥ 1,000 por persona, o alrededor de 250 baht.
Si finalmente se implementa el impuesto, el turismo de Tailandia se vería afectado ya que la cantidad de turistas salientes se contraería, lo que generaría flujos desequilibrados de personas y causaría dificultades para las aerolíneas que planean vuelos a Tailandia.
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